Eso es lo que sucedió conmigo, el principio de esta relación maravillosa  que tengo con la CUAED, inició cuando en el último año de la licenciatura  la Mtra. Ofelia Eusse Zuluaga llego a  mi vida o viceversa.  Desde mi primer año como estudiante en el colegio de pedagogía decidí - gra cias al Mtro.Porfirio  Morán- que me dedicaría a la docencia.

  Debo confesar que  a lo largo de mi formación una de las asignaturas que me costó mucho comprender fue la didáctica. Pero  todo cambió cuando la Mtra.Ofelia me dió clase  justamente de esa materia tan difícil, comprendí que la didáctica no es algo que está  separado del docente, que no es la sucesión de pasos  que se  deben  de seguir  para instruir al otro, sino que la didáctica es algo más que eso, que  implica que el docente  asuma  una posición  en el mundo, es decir,  debe de reflexionar  que tipo de hombre quiere formar y para qué sociedad.